sexta-feira, 28 de dezembro de 2007

El Mandamiento Que Nos Renueva

“Queridos hermanos, lo que os escribo no es un mandamiento nuevo, sino un antiguo que habéis tenido desde el principio. Este mandamiento antiguo es el mensaje que ya oísteis. Por otra parte, lo que os escribo es un mandamiento nuevo, cuya verdad se manifiesta tanto en la vida de Cristo como en la vuestra, porque la oscuridad se va desvaneciendo y ya brilla la luz verdadera”. - 1Jn 2.7-8

El mensaje del apóstol Juan ahora es muy sencilla y clara: el mandamiento que hemos recibido de su parte, y de parte de los demás apóstoles, es a la vez un mandamiento antiguo y nuevo. Es antiguo porque no es novedoso y porque lo conocemos desde el principio de nuestra fe, incluso muchos de nosotros lo recibimos, oímos y conocemos desde niños. Eso hace con que el mandamiento tenga una perspectiva de antigüedad, tanto en la historia de la humanidad, como en nuestra propia historia de vida personal. Pero su antigüedad no significa que sea viejo, que no esté al día o que no sirva para la sociedad de hoy.

Al revés, el antiguo mandamiento es también un mandamiento nuevo. En ese sentido, es nuevo porque su “verdad se manifiesta tanto en la vida de Cristo como en la vuestra”, dice Juan. Es nuevo porque se manifiesta hoy a través de la vida de Cristo llegando hasta nuestra propia vida. Es nuevo porque se manifiesta en cada uno de nosotros que creemos en Jesucristo y vivimos por él. Eso significa que los mandamientos de Dios se renuevan día a día en nuestros corazones, mentes y decisiones a lo largo de la vida. El nuevo, el que nos renueva desde dentro se puede ver porque “la oscuridad se va desvaneciendo y ya brilla la luz verdadera”. O sea, podemos seguir los pasos de la renovación de Dios en nuestras vidas cuando todo lo que tenemos que oscurece a Dios en nosotros se desvanece y la luz de la vida de Dios y la fe por medio de Cristo aumenta y brilla con más intensidad en nuestros anhelos y decisiones.

¡Que Dios nos ayude a crecer cada vez más en el conocimiento e búsqueda de sus mandamientos, renovando así nuestras vidas paso a paso!

Jesús: la Manifestación del Amor de Dios

“En cambio, el amor de Dios se manifiesta plenamente en la vida del que obedece su palabra. De este modo sabemos que estamos unidos a él: el que afirma que permanece en él, debe vivir como él vivió.

1 Jn 2.5-6

Decir que conocemos a Dios y no obedecemos sus mandamientos nos convierte en mentirosos (2.4). En cambio, conocer a Dios y estar unido a él es fruto de la manifestación del amor de Dios en la vida humana. El verdadero conocimiento de Dios y relación con él se basa en su amor por nosotros y el lo que hizo a nuestro favor por amarnos. El amor de Dios se manifestó a través del sacrificio de Jesucristo y nos acerca a él. En eso está la esencia de la salvación y de la vida eterna.

Pero la salvación, la vida eterna y la manifestación del amor de Dios hacia nosotros nos demandan una nueva vida. Disfrutar de la salvación y el amor exige de nosotros unos compromisos muy concretos: obedecer a su palabra y vivir como él vivió. De hecho, son una sola realidad. El mensaje del apóstol Juan es que no hemos sido alcanzados por el amor y la gracia de Dios para seguir viviendo como nos dé la gana, sino que para reproducir en nuestra propia vida los valores y los principios vividos y enseñados por Cristo.

Eso es, en esencia, la razón del nacimiento de Jesús. Vino para que tengamos vida eterna y para que la vivamos desde ahora. Por eso, es muy importante renovar nuestra vida ante Dios, confesando nuestro pecado de alejamiento de él y consagrándonos a una vida de obediencia de su palabra, la Biblia.

Deseamos a todos que en las conmemoraciones de la Navidad, acordémonos de la verdadera razón de porque Cristo vino al mundo. ¡Dios nos bendiga!

¿Cómo conocemos a Dios?

“¿Cómo sabemos si hemos llegado a conocer a Dios?

Si obedecemos sus mandamientos.

El que afirma: Lo conozco, pero no obedece sus mandamientos,

es mentiroso y no tiene la verdad.”

1 Jn 2.3-4

La duda humana respecto a Dios siempre pasa por las mismas preguntas. Una muy común es la que nos plantea el apóstol: ¿cómo sabemos si hemos llegado a conocer a Dios? Esa es una duda razonable que sigue a los que buscan a Dios. La respuesta de Juan puede ser la que muchos no quisieran: si obedecemos sus mandamientos hemos llegado a conocerle. Quizás quisiéramos respuestas más espirituales o sobrenaturales, que fueran más visibles y, a la vez, no nos comprometieran tanto con la transformación de nuestras vidas bajo los principios de la Palabra de Dios y de sus mandamientos.

Conocemos a Dios cuando conocemos su Palabra y vivimos bajo ella. Lo contrario seria negar la verdad de Dios en nosotros mismos. Eso significa que tenemos ante nosotros el desafío de recuperar y vivir un cristianismo distinto de lo que ve hoy por todo el mundo. Implica en empezar una lectura y relectura constante del texto bíblico extrayendo los valores y principios del Reino de Dios para nuestras vidas y sociedad. En ese sentido, conocer a Dios y ser cristiano es asumir una espiritualidad misionera que anuncia los mandamientos de Dios por nuestra propia forma de vivir.

¡Que Dios nos ayude cada día a conocerle más y vivir su Palabra!

Jesucristo: Nuestro Intercesor

“Mis queridos hijos, os escribo estas cosas para que no pequéis. Pero si alguno peca, tenemos ante el Padre a un intercesor, a Jesucristo, el Justo. Él es el sacrificio por el perdón de nuestros pecados, y no solo por los nuestros sino por los de todo el mundo”

1 Jn 2.1-2

El objetivo principal del apóstol Juan en escribir esta carta a los cristianos de sus días y a todos nosotros los demás cristianos del mundo es incentivarnos a no pecar. Luchar contra el pecado que habita en nosotros es uno de los desafíos más grandes de la vida cristiana. Es una lucha que se lleva a diario. Es una lucha en la que parece que estamos vencidos, pero él mismo nos dice que para enfrentarnos la realidad del pecado humano y nuestro alejamiento natural de Dios, tenemos ante el Padre a Jesús que se pone como nuestro intercesor.

Luchar y vencer el pecado es una experiencia que la podemos vivir cada día, porque el único justo ante Dios, Jesús, se ha hecho sacrificio por nosotros y por todo el mundo. Vencer el pecado es recibir día a día el perdón de Dios a través de Cristo y luchar contra el pecado es reconocer nuestra condición de alejamiento de Dios (pecado) y confesarle nuestras faltas, sean cuales sean.

Podemos seguir viviendo la espiritualidad cristiana seguros del perdón y de la gracia de nuestro Dios. ¡Que Dios nos bendiga!

Teología Para la Vida: la Confesión de Pecados

“Si afirmamos que no hemos pecado, lo hacemos pasar por mentiroso y su palabra no habita en nosotros” – 1 Jn 1.10

Aquí encontramos la última implicación para la vida cristiana del principio teológico establecido por el apóstol Juan de que Dios es luz y en él no hay ninguna oscuridad: afirmar que no pecamos es considerar Dios mentiroso y que su palabra no tiene ningún significado para nuestras vidas. Así siendo, no es posible vivir la espiritualidad cristiana creyendo, a la vez, que las cosas que pensamos, decimos y hacemos están libres de todo pecado. Eso es, además de negar el efecto de la palabra de Dios en nuestras vidas, llamar a Dios de mentiroso.

Creemos y partimos del hecho de que Dios es luz y en él no hay ninguna oscuridad. Ante eso, debemos reconocer cada día nuestros pecados y confesarlos a Dios. Reconocer ante Dios que somos pecadores y cometemos errores es reconocer que Jesucristo es el único capaz de intervenir en nuestra vida puesto que ha muerto y resucitado por nosotros. En esto está el fundamento para la confesión de nuestros pecados y para disfrutar al diario del perdón y de la gracia de Dios.

Así que debemos revisar nuestras vidas, lo que deseamos, lo que hacemos, lo que decimos, lo que planeamos y confesarnos a Dios para que su palabra ejerza un poderoso efecto transformador, día a día, en todos nosotros.

¡Que Dios nos bendiga!

Teología Para la Vida: Recibir el Perdón de Dios

“Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos lo perdonará y nos limpiará de toda maldad” – 1Jn 1.9

El principio teológico básico para la vida cristiana, con base en lo que los apóstoles han oído, visto, contemplado y tocado (1.1-4) el hecho de que Dios es luz y en él no hay ninguna oscuridad (1.5). Hemos notado dos implicaciones para nuestra vida cristiana diaria: es imposible mantener comunión con Dios y vivir en la oscuridad (1.6-7) y el pecado es una realidad en la vida humana (1.8).

Ahora nos toca comentar la tercera implicación de ser Dios la luz: él nos perdona (1.9). El perdón de Dios se basa en su propia persona como el Dios que es luz, él es fiel y justo y mantiene eternamente su promesa y salvación concretadas en Jesucristo. Es plenamente fiel a su obra de redención, por eso nos puede perdonar los pecados. De esa forma, aprendemos que el perdón de los pecados es parte fundamental del mismo ser de Dios y de su proyecto de salvación. Pero también aprendemos que Dios es justo al perdonarnos, puesto que su perdón es parte de la justicia hecha en la cruz en sustitución a nosotros mismos.

Así, de una parte Dios nos perdona porque el perdón es parte de su fidelidad y justicia hacia si mismo y su obra. De otra parte, a nosotros nos toca la confesión de nuestros pecados a Dios. Confesar es homologar, o sea, es firmar abajo de lo que Dios dice de nosotros. Dice que somos pecadores y que estamos perdidos sin la gracia de Cristo; confesamos que sí. Dice que las cosas que hacemos, pensamos y decimos están en desacuerdo con su Palabra; confesamos que sí. Reconocer de corazón nuestra naturaleza pecaminosa y los pecados que cometemos al diario es parte fundamental de la espiritualidad cristiana. Es importante que todos los días nos pongamos ante Dios para confesar nuestros pecados y disfrutar de su gracia perdonadora.

¡Que Dios nos bendiga a todos!

Teología Para la Vida: Reconocer Nuestro Pecado

“Si afirmamos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos y no tenemos la verdad” - 1 Jn 1.8

Como hemos visto en el v. 5, Juan nos presenta un importante enunciado teológico que fundamenta la vida cristiana: Dios es luz y en él no hay ninguna oscuridad. Vimos, igual, una primera implicación de este fundamento para la vida cristiana diaria de cada uno (v. 6-7).

Ahora me gustaría comentar una segunda implicación para nosotros, como la encontramos en el v.8: el pecado es una realidad en la vida humana. Hoy día, hablar de pecado está pasado de moda, pero vivir la fe cristiana se basa en que el Espíritu Santo nos convence del pecado, de la justicia y del juicio (Jn 16.8-11). Reconocer nuestra naturaleza pecaminosa es la puerta abierta para recibir el perdón, es reconocer que fracasamos ante Dios y carecemos completamente de su gracia. Reconocer nuestro pecado es reconocer que dependemos de Dios y que vivimos bajo los efectos regeneradores del sacrificio de Jesús.

Pero, como dice Juan, si no reconocemos el pecado en nuestra propia naturaleza estamos alejados de la verdad de Dios y vivimos bajo un autoengaño. Ahí si la vida cristiana pierde su significado y valor: pasamos a vivir una especie de ilusión cristiana, creyendo que nuestros deseos son los de Dios y que nuestras verdades son las de Dios.

Por ser Dios la verdadera luz no podemos nos alejar de él, antes es preciso que reconozcamos y confesemos nuestro pecado para recibir su gracia y perdón. Os quiero invitar, por tanto, a que repasemos nuestra vida ante la Palabra de Dios, a cada día, y confesemos a Dios quienes somos. Esta es la base para se vivir la fe cristiana.

¡Que Dios nos bendiga a todos!

Teología Para la Vida: Vivir en la Luz de Dios

“Éste es el mensaje que hemos oído de él y que os anunciamos: Dios es luz y en él no hay ninguna oscuridad. Si afirmamos que tenemos comunión con él, pero vivimos en la oscuridad, mentimos y no ponemos en práctica la verdad. Pero si vivimos en la luz así como él está en la luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de su Hijo Jesucristo nos limpia de todo pecado.”

1 Jn 1.5-7

El apóstol Juan establece como principio teológico para la vida cristiana, con base en lo que los apóstoles han oído, visto, contemplado y tocado (1.1-4) el hecho de que Dios es luz y en él no hay ninguna oscuridad. Desde éste enunciado teológico se puede encontrar diferentes implicaciones para nuestra vida cristiana diaria. Así, Juan nos presenta 4 implicaciones que empiezan siempre con la expresión “si afirmamos” (v.6, 8, 9 y 10).

La primera (v.6) pone que es imposible decir que tenemos comunión con Dios que es luz pero a la vez vivimos en la oscuridad. Luz y tinieblas son realidades opuestas. Vivir en la luz de Dios es totalmente incompatible con mantener compromisos con las obras de la oscuridad. La vida cristiana es, por tanto, una vida limpia y sincera ante Dios. Vivir en la luz de Dios nos conduce a tomar decisiones compatibles con la Palabra de Dios.

Lo contrario, o sea, decir que mantenemos comunión con el Dios, pero vivir en las obras de las tinieblas, manteniendo compromisos con el pecado, el engaño y la mentira, es por naturaleza una negación de la verdad y de Dios. No se puede vivir aparentándonos cristianos pero negando la Palabra de Dios.

Pero cuando vivimos en verdad con el Cristo que es luz, mantenemos comunión con los demás que también viven con Cristo (la iglesia) y recibimos el perdón por todos nuestros pecados. La espiritualidad cristiana se base en vivir la comunión con el Dios que es luz construyendo día a día una comunidad de creyentes que busca siempre una vida limpia ante Dios. Así, iglesia y perdón son dos elementos que manifiestan en la vida común de todos nosotros el enunciado teológico de que Dios es luz y en él no hay ninguna oscuridad.

¡Que Dios nos ayude en nuestra vida cristiana diaria!

Estudiando la Palabra de Dios

“Os anunciamos lo que hemos visto y oído, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros. Y nuestra comunión es con el Padre y con su Hijo Jesucristo. Os escribimos estas cosas para que nuestra alegría sea completa”

1 Jn 1.3-4

Lo que los apóstoles han visto y oído respecto a Jesús, o sea, todas sus experiencias de vivir a diario con Cristo es lo que nos anuncian. Eso significa que recibimos por medio de la Biblia el conjunto de la enseñanza apostólica tal como ha sido revelada por Dios en su Hijo Jesús. De esa manera, al recibir con fe la Palabra de Dios, vivimos en comunión con los propios apóstoles. Formamos con ellos, así, un solo pueblo, el pueblo de Dios.

Es muy importante nuestra identificación con los apóstoles, por medio de las palabras de la Biblia, visto que ellos mantenían una comunión personal con el Cristo terreno. De esa forma, creyendo en la Palabra de Dios e viviendo bajo su guía, mantenemos comunión con el Padre y con su Hijo Jesús. Eso significa que el fundamento para nuestra comunión con Dios y para nuestra propia fe es la Biblia.

La conclusión de Juan es muy clara y sencilla: “para que nuestra alegría sea completa”, o diciéndolo de otra forma, para que la gracia que hemos recibido, los apóstoles y todos los demás a lo largo de la historia humana, sea vivida en plenitud en todos los niveles de la vida.

Tenemos ante nosotros el desafío y la necesidad de una constante búsqueda de la plenitud de la gracia de Dios manifestada en nuestro ser, familia y trabajo renovándonos a diario. Para tanto, es preciso dedicarnos a la lectura y estudio de la Palabra de Dios.

¡Que el mismo Dios nos ayude en esta labor!

Jesús, la Vida Eterna

“Esta vida se manifestó. Nosotros la hemos visto y damos testimonio de ella, y os anunciamos a vosotros la vida eterna que estaba con el Padre y que se nos ha manifestado”

1 Jn 1.2

El Verbo que es vida (1,1), Jesús, se manifestó. La manifestación de Jesucristo se hizo completa con la encarnación. No solo nació sino que vivió la experiencia humana en todas sus dimensiones, sin que todavía haya pecado. En ese sentido, Cristo es la manifestación más plena de la propia vida de Dios, ¡es la vida que se manifiesta!

Él se ha manifestado a los apóstoles. Juan y los demás apóstoles vieron y vivieron con la vida (Jesús) y ahora dan testimonio acerca de ella. El testimonio apostólico es la base y la estructura del cristianismo. Su testimonio está registrado en el Nuevo Testamento y compone, junto con el Antiguo, la revelación de la vida en Cristo.

Los apóstoles nos anuncian la vida eterna: la vida que estaba con el Padre ahora uno la puede vivir. Esta es la esencia del cristianismo, vivir la vida de Dios en nuestra vida común, es dejar que nuestra vida común de todos los días se renueve y se transforme bajo la presencia de la vida de Dios, creando nuevos ideales, llevándonos a nuevas decisiones y produciendo una nueva esperanza en Dios.

¡Que esta vida (Jesús) sea buscada por todos nosotros!

La Palabra de Dios, Nuestra Guía Permanente

“Lo que ha sido desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros propios ojos, lo que hemos contemplado, lo que hemos tocado con las manos, esto os anunciamos respecto al Verbo que es vida.”

1 Jn 1.1

El apóstol Juan empieza su carta afirmando la experiencia que él y los demás apóstoles tuvieron al principio con Jesucristo. Ellos le han oído, visto, contemplado y tocado. Tuvieron una experiencia de comunión completa con Jesús. Se convirtieron en sus discípulos y en sus amigos. En esto, por tanto, se concentra la esencia del cristianismo: en vivir con Cristo y en vivir a Cristo.

Todo lo que han vivido (oído, visto, contemplado y tocado) con Cristo, “esto os anunciamos respecto al Verbo que es vida”. En ese sentido, la experiencia de los apóstoles con Cristo es el principio fundamental para la comprensión de la fe cristiana a lo largo de la historia. En otras palabras, la fe que vivimos encuentra su razón de ser en la experiencia de fe de los apóstoles, tal como la leemos en la Biblia.

Fortalecer la fe para nosotros mismos y comunicarla a otras personas solo es posible a medida que la buscamos dentro del contexto de la Biblia, la Palabra de Dios. Así siendo, os dejo con el desafío de buscar en la Palabra de Dios la guía permanente para nuestra fe y vida.

¡Que Dios nos bendiga a todos!

quarta-feira, 26 de dezembro de 2007

Celebração Natalina na Igreja de Torrelodones



No domingo passado (23/12) os irmãos da igreja em Torrelodones se reuniram novamente em nossa casa para o culto especial de Natal, quando também celebramos a Santa Ceia. Foram momentos de muita edificação para as nossas vidas e de comunhão entre nós. Logo após o culto continuamos todos juntos e desfrutamos de um delicioso almoço.

Culto de Natal na Igreja de Getafe



Na noite de Natal realizamos um culto especial com os irmãos da congregação em Getafe (Madrid) onde damos assistência pastoral. Na ocasião também celebramos a Santa Ceia e contamos com uma boa participação dos irmãos. Após o culto foi servido um delicioso jantar preparado pelas famílias da igreja. Nas fotos vemos a celebração do culto e o pessoal na cozinha se preparando para o jantar.

quarta-feira, 12 de dezembro de 2007

Hopedar: Uma Bênção de Deus!

“Porque não havia lugar para eles na hospedaria”

Lc 2.7b

Todos nós gostamos do Natal, das ruas enfeitadas de luzes, as grandes e belas árvores que os centros comerciais fazem, é tudo tão lindo!... Mas as luzes e as bolas brilhantes de variadas cores escondem uma grande falta: a falta de vontade de hospedar.

Maria quando já estava com contrações para dar à luz não encontrou nem hospedaria, nem ninguém que a quisesse hospedar. Por isso, deu à luz seu primogênito em uma estrebaria, o envolveu em panos e o colocou numa manjedoura. Maria e José, como pais zelosos, sabiam que aquele lugar não oferecia as condições de higiêne e conforto, mas fizeram o que estava ao seu alcance. Era isso o que podiam fazer naquele momento para que seu filhinho não ficasse ao relento, era melhor ficar debaixo de um teto aquecido junto aos animais.

A Bíblia nos ensina a hospedar e também como fazê-lo. É o que lemos em Rm 12.13: “compartilhem o que vocês têm com os santos em suas necessidades. Pratiquem a hospitalidade.” Hospedar é isso, é compartilhar o que temos com o nosso próximo. Por isso, gostaria de compartilhar algumas coisas práticas que aprendemos nestes 25 anos em que estamos exercendo a hospitalidade:

1. Não se preocupe em impressionar o visitante, ele apenas quer sua atenção e companhia.

2. Ore por seus visitantes para que o Senhor use esse tempo em sua vida e na de seus convidados.

3. Não se meta em dívidas, o Senhor somente quer que você compartilhe o que tem, não o que gostaria de ter.

4. Não faça receitas mirabolantes e caras, um bom arroz com feijão, salada e bife agradam mais que qualquer outro prato que a deixará cansada e com menos tempo para desfrutar da visita.

5. Não faça receitas novas, use aquelas que você sabe fazer bem e que agrada a todos. Tentar uma receita nova pode se transformar em uma decepção para você.

6. Lembre-se de que vocês não estão sendo avaliados, o visitante só precisa de um pouco de atenção. Todos somos imperfeitos.

7. Mantenha a casa em ordem, mas não é preciso que esteja impecável. Não fique fazendo grandes faxinas antes e durante a presença de seus convidados. Aproveite a presença deles e relaxe.

8. Procure fazer as coisas de modo que sua rotina seja mantida. Inclua passeios desde que isso não tumultue sua rotina. Deixar suas atividades normais para agradar o visitante pode fazê-lo sentir que está atrapalhando.

9. Receber um convidado pode ser uma ótima oportunidade para rirem juntos e ensinar os filhos a compartilhar o que têm.

10. Tente compensar seus filhos por precisarem emprestar seus quartos aos visitantes. Sempre os compensávamos com algo simples a ponto de fazerem escalas para ver quem quem seria o próximo a emprestar o quarto.

11. Se há assuntos não tratados entre os membros da família, é melhor não ficar expondo o problema a seus convidados.

12. Procure saber com antecedência se o visitante tem alguma limitação física (nesse caso, afaste os móveis, etc) ou intolerância a algum alimento, bem como suas preferências.

13. Sendo possível, faça todos os cafés e sucos sem açúcar e prepare os alimentos sem usar caldos em tabletes, molho de soja e margarina, devido o glutamato monossódico que pode causar alergia grave; as sobremesas podem ser gelatina ou uma fruta de época.

14. Coloque etiquetas com a voltagem elétrica nos banheiros e quartos.

14. Ao receber crianças mantenha os remédios e produtos de higiêne e limpeza fora do alcance delas para evitar perigos.

15. Ao receber crianças guarde os brinquedos favoritos de seus filhos, ele pode emprestar outros de que goste menos e assim evita-se desconforto entre todos.

16. Ao receber crianças estabeleça os horários e escalas para uso de videogame, computador e TV e avise antes.

Não desanime, hospedar é prestar um serviço aos santos e um dom a serviço de Deus. Talvez um dia possa ser surpreendido como afirma o texto bíblico: “não se esqueçam da hospitalidade, foi praticando-a que sem o saber, alguns acolheram anjos” (Hb 13.2). Que Deus nos abençoe!

Rosa Maria de Oliveira del Pino

segunda-feira, 10 de dezembro de 2007

Com a Igreja de Sevilla



A Rosa e eu passamos o último final de semana (8-9 de dezembro) em Sevilla (Espanha) visitando os nossos missionários alí, Rev. Everton, Nayra e seus filhos Rute e Leandro, quando tivemos a grata satisfação de conhecer e conviver um pouco com os irmãos da Igreja Presbiteriana de Sevilla, conhecer o trabalho que realizam de evangelização e apoio a imigrantes, bem como conversar com os nossos obreiros sobre suas vidas e o desenvolvimento de seu ministério. Nas fotos acima o momento de leitura da Palavra e pregação e uma vista parcial da igreja.

Visita aos Obreiros em Don Benito


Nos dias 4-5 de dezembro estivemos, a Rosa e eu, visitando nossos missionários na cidade de Don Benito (Espanha). Tratam-se do Rev. Dirceu Amorim, sua esposa Tirza e seus filhos Mateus e Maíra. Foi uma excelente oportunidade para conhecermos melhor o trabalho que estão fazendo junto à Igreja Presbiteriana de Don Benito e à Associação de Imigrantes, bem como para conversarmos sobre suas vidas e ministério após 4 anos trabalhando neste campo. Na foto acima a Rosa acompanha o casal Dirceu e Tirza tendo ao fundo uma ponte de estrutura romana reconstruída no sec. XII que ainda hoje é usada pela população local.

Já somos uma congregação!


Com a graça de Deus o grupo que se reúne em nossa casa foi oficialmente recebido pela Igreja Evangélica Presbiteriana da Espanha (filha do trabalho missionário da APMT-IPB na Espanha), no dia 6 de dezembro, como congregação da Igreja Presbiteriana de Huelva. Isso ocorreu durante a reunião da Mesa Representativa (presbitério) da Igreja Evangélica Presbiteriana da Espanha na semana passada realizada na cidade de Huelva, a poucos km de onde partiram as caravelas de Colombo rumo às Américas em 1492. Na foto acima a reunião da Mesa Representativa.

segunda-feira, 3 de dezembro de 2007

Dezembro 2007

Durante este mês louvemos a Deus:
1. Pelo andamento dos trabalhos de plantação da Igreja Presbiteriana de Torrelodones (Madrid) e pela vida da cada pessoa e família que tem se aproximado da igreja
2. Pelo apoio pastoral que podemos dar aos brasileiros presbiterianos que estão se reunindo em Getafe (Madrid)
3. Pela estruturação da Base Europa aqui em Madrid visando apoiar todos os nossos obreiros e seus projetos missionários nos países europeus
4. Por havermos sido recebidos como congregação da Igreja Presbiteriana de Huelva

Intecedamos a Deus especificamente:
1. Pela completa recuperação da saúde da Rosa e seu tratamento
2. Pela reunião da Mesa Representativa da Igreja Evangélica Presbiteriana da Espanha, filha do trabalho missionário da APMT-IPB, no dia 6 de dezembro em Huelva
3. Pelo encontro de todos os missionários da APMT que trabalham na Espanha e suas famílias em um retiro no dia 7 de dezembro
4. Pelos vários projetos missionários desenvolvidos na Espanha, Portugal, Inglaterra, Escócia, Itália, Romênia e Rússia e pelas igrejas que estão se formando nesses países
5. Por mais oportunidades de avanço da obra missionária nos países europeus e pelo envio de mais missionários para fortalecer os trabalhos
6. Pela cirurgia do Rev. Erasmo (Portugal) de hernia iguinal no dia 03 de janeiro de 2008 e seu pleno restabelecimento

quarta-feira, 21 de novembro de 2007

Monastério de San Lorenzo de El Escorial


Este mosteiro foi construído por Felipe II no século XVI como referência para a contra-reforma e a inquisição espanhola. Hoje abriga uma das maiores bibliotecas católicas da Europa.

terça-feira, 20 de novembro de 2007

A Organização da Casa

Sempre que pensamos em organização, pensamos que é um dom nato de certas pessoas. Porém, organização pode ser o resultado de disciplina e treinamento. A organização da casa pode se tornar uma tarefa mais fácil e que pode ser feita com prazer. Isso, vindo de mim, parece fácil. Porém, não nasci com este dom, mas ao formar uma família notei a importância de desenvolver a organização. Ter uma casa organizada pode nos economizar tempo, facilitar a vida em família, evitar conflitos entre os membros da casa, direcionar a rotina diária, aliviar e descansar ao visualizarmos cada tarefa feita no seu tempo.

Além disso, a organização é condizente com a Palavra de Deus (Tt 2.3-5). No verso 5, o apóstolo Paulo põe em relevância a prudência, a pureza e o sermos boas donas de casa. Hoje em dia a sociedade vê o trabalho doméstico como algo sem valor e até depreciativo. Precisamos nos apegar à Palavra de Deus para aprender a valorizar o serviço doméstico e, por meio dele, demonstrar amor ao marido e aos filhos. Amando desta forma, podemos demonstrar à sociedade atual o valor da família, da fé e do serviço a Cristo. Com mais tempo podemos nos dedicar a outras tarefas importantes, como o desenvolvimento dos nossos dons e talentos no Corpo de Cristo.

Diante disso, seguem algumas sugestões, que se levadas a cabo, poderão facilitar a tarefa de organização da casa:

01. Não faça da organização da casa um campo de batalha. Escreva todas as atividades e responsabilidades domésticas e compartilhe com sua família para que todos participem na divisão das tarefas. Faça-os entender com amor que você não pode fazer tudo sozinha.

02. Reparta os serviços domésticos, elaborando um quadro de tarefas: o tempo para cada tarefa, o dia, o horário de início e término das tarefas. Isso deve ser feito com amor e paciência, não exigindo que tudo saia perfeito porque, afinal, eles estão aprendendo.

03. Elabore uma lista para tarefas que não são feitas todos os dias, como faxina da cozinha, limpeza de áreas externas, faxina dos banheiros, etc. Divida a faxina de cada segmento e o cuidado com as roupas em dias alternados, mesmo que você tenha ajudante.

04. Organize os armários conforme o uso de maneira que cada coisa possa ser facilmente encontrada.

05. Utilize diversos tipos de caixas e arquivos que se encontra no mercado para organizar pequenas coisas.

06. Faça um orçamento doméstico, junto com a sua família, constando de: receita, despesas fixas e despesas eventuais.

07. Organize um tempo diário para leitura pessoal da Bíblia e combine com a família os dias e horários para o culto doméstico.

Não se esqueça de colocar todas estas coisas nas mãos de Deus e, assim, ter tranqüilidade e possibilidade de desenvolver outras atividades e ministérios.

Rosa Maria de Oliveira del Pino

segunda-feira, 19 de novembro de 2007

Mais Uma Igreja em Madrid


Ontem (domingo, 18 de novembro) demos assistência pastoral a um grupo de brasileiros presbiterianos que estão se reunindo semanalmente em suas próprias casas na região sul de Madrid. Junto com os casais da nossa igreja de Torrelodones, éramos um grupo de 37 adultos e 8 crianças. Praticamente não cabíamos na casa que nos recebeu, como a foto pode mostrar. Durante o culto celebramos a Santa Ceia. O grupo consta de famílias inteiras, vários jovens e alguns recém-convertidos. Estão muito animados e desejosos de se organizarem como igreja em breve. Oremos por eles e por mais uma igreja presbiteriana aqui em Madrid.

terça-feira, 6 de novembro de 2007

Novembro 2007

Para este mês gostaríamos de convidá-lo a agradecer a Deus conosco por:
1. o reestabelecimento da saúde da Rosa após quase 5 meses de consultas, exames e tratamentos
2. a recuperação da saúde do Rev. Erasmo (Portugal)
3. a recuperação da saúde do Rev. Everton (Espanha) após o duro tratamento realizado
4. a liberação da carteira de residência permanente na Espanha para o Rev. Everton e família

Pedimos, também, que ore conosco intercedendo por:
1. fortalecimento e crescimento do trabalho de plantação da Igreja Presbiteriana aqui em Torrelodones (Madrid)
2. continuidade e ampliação dos projetos missionários da APMT-IPB por toda a Europa
3. recursos necessários para a viagem ao Brasil, este mês, do Rev. Francisco e família (Portugal) para a formatura em Teologia e casamento de seu filho Geazy
4. próximas visitas aos nossos campos missionários europeus para atendimento pastoral aos obreiros e seus projetos
5. as 30 crianças (filhas de imigrantes) que são atendidas no projeto social da igreja presbiteriana de Sevilla (Espanha) e demais atividades da igreja (Rev. Everton)
6. europeus e imigrantes neste continente que, juntos, foram uma população cada vez mais secularizada com pessoas que padecem de uma profunda solidão, encontrando no prazer imediato o sentido último de suas vidas

Melhorando nossa comunicação

A vida em família é o projeto mais arriscado do ser humano. Quando escolhemos nosso cônjuge não podemos prever todas as implicações que esse ato demanda. Apesar de vivermos na era das comunicações em massa, a comunicação cotidiana em família representa um desafio constante. Seja por que muitas vezes não olhamos nos olhos quando falamos, seja por que há muitas informações que devem ser repetidas diariamente ou pelo pouco tempo que dispomos.
No entanto, é necessário dedicar mais atenção à nossa comunicação diária com a finalidade de melhorá-la, pois é da comunicação que advém os maiores conflitos e as maiores bênçãos. Como ajuda a todos nós, casais e famílias, gostaria de sugerir algumas regras feitas por especialistas:
1. Busque um momento diário para orarem juntos, um pelo outro e para lerem a Bíblia. Ore sempre antes de apresentar a dificuldade ao seu cônjuge e peça a Deus sabedoria e a oportunidade adequada para conversarem e colocarem tudo com amor. Lembre-se que Deus é o Deus que sempre se comunicou e ainda se comunica conosco!
2. Se deseja captar a atenção de seu cônjuge e lograr que este escute com vontade de colaborar, aproxime-se de forma agradável. Se nos aproximamos com acusações, o mais provável é que o outro atue na defensiva e se predisponha negativamente.
3. Espere o momento oportuno para tratar o problema. Não conseguimos nada aproximando-nos de maneira agradável, porém no momento inadequado. O melhor é pedir ao nosso cônjuge que determine o melhor momento.
4. Ao apresentar o problema seja específico, deve ser uma abordagem concreta. Uma abordagem vaga geralmente recebe respostas vagas.
5. Diga o que gostaria, não o que você não gosta. Se você aborda o problema explicando o que você não gosta, estará assumindo uma postura crítica e negativa de abordagem do tema, e essa não é a melhor maneira de obter colaboração. Se dizemos o que gostaríamos, estamos fazendo uma petição, que sempre é muito mais agradável do que uma crítica.
6. Expresse sua parcela de responsabilidade. Se somos capazes de expressar nossa responsabilidade no assunto abordado, é mais fácil que o outro também assuma sua própria responsabilidade.
7. Expresse seus sentimentos. Às vezes, abordamos as coisas de maneira demasiadamente prática e racional. Assim, damos a impressão de que somos calculistas. Se os sentimentos não se expressam, o outro parte do pressuposto de que os sentimentos não importam.
8. "O bom se for breve, é duas vezes bom". Seja capaz de expressar as coisas evitando divagações. O ideal é que esboce os pontos principais que você quer tratar.
9. Evite trazer à tona coisas do passado. Falar do presente é ser realista, é enfocar os problemas com o fim de solucioná-los, e falar do futuro implica confiança de que os problemas serão resolvidos.
10. Sempre ofereça alternativas de solução. Quando nos limitamos a expor os fatos diante de uma dificuldade, atribuímos ao outro a total responsabilidade de encontrar a saída e damos a entender que não somos companheiros na busca de soluções.
Rosa Maria de Oliveira del Pino

terça-feira, 30 de outubro de 2007

Visita a Portugal (out/2007)

No início do mês de outubro visitamos as famílias dos nossos missionários em Portugal: Francisco e Elisama (Carnaxide, perto de Lisboa) e Erasmo e Nilza (Paços de Ferreira, perto de Porto). Nessa ocasião tivemos a oportunidade tanto de acompanhar pastoralmente suas vidas, como de conhecer melhor seus ministérios e os contextos em que estão inseridos. Nestas duas localidades, os missionários da APMT pastoreiam igrejas ligadas à Igreja Cristã Presbiteriana de Portugal com a qual mantemos convênio de trabalho missionário. Os desafios de ambos são muito grandes e devemos nos unir em oração em favor deles.

Dia da Reforma


No último domingo (28/10) nos reunimos como de costume às 12:00 H aqui em casa para culto e estudo bíblico. Almoçamos juntos e saímos para um passeio, acompanhados por alguns irmãos da Igreja Príncipe de Paz (de uma cidade vizinha) por alguns pontos de Madrid que foram importantes para a Reforma espanhola. Fomos conduzidos nesse passeio pelo Pr. Gabino, um escritor e historiador espanhol que se especializou no estudo reforma espanhola e atualmente dirige o Centro de Estudos da Reforma aqui em Madrid. À medida que visita seguia ele nos contava o que havia ocorrido de pertinente à Reforma naquele local. Foi um "passeio" muito instrutivo! Começamos visitando a Universidade de Alcalá de Henares (antiga Complutense) onde Juan de Valdés e outros fizeram a primeira tradução da Bíblia para o castelhano e concluímos o passeio na Plaza de Oriente, ao lado do Palácio Real, ouvindo um pouco sobre a unificação dos poderes político e religioso na Espanha e sua conseqüência para o fim da liberdade religiosa na Espanha por séculos. No caminho visitamos, também, el quemadero, local onde os protestantes eram queimados após os autos de fé e visitamos o Palácio de la Inquisición onde os julgamentos inquisitoriais eram realizados. Enfim, essa foi uma forma instrutiva de comemorarmos como igreja reformada o tão significativo Dia da Reforma.
Na foto acima estamos diante da fachada principal da Universidade de Alcalá de henares

Início da Igreja


No início de setembro nos reunimos pela primeira vez como Igreja Presbiteriana de Torrelodones (Madrid). A reunião foi realizada em nossa própria casa onde estudamos o texto de Mc 1.1-13 enfatizando os elementos que fundamentam o evangelho de Jesus Cristo: juízo e salvação, arrependimento e perdão dos pecados e a identificação de Cristo com o ser humano por seu batismo e tentação. A primeira reunião contou com a participação de 5 pessoas, sendo que outros 3 não puderam vir. Já no domingo passado (21/10) celebramos a primeira Santa Ceia. Estamos bastante animados com o início da igreja.

Torrelodones é uma cidade da Grande Madrid, distante apenas 29 Km da capital espanhola e ligada à mesma por uma excelente rodovia. Sua história é muito antiga e rica, só para dar uma idéia o símbolo da cidade é uma torre (daí vem seu nome) construída no século IX pelos árabes como parte de um complexo de defesa da região. Sua reconquista e repovoamento pelos espanhóis já data de 800 anos e durante os séculos XVI e XVII foi parada obrigatória para os reis e outros viajantes que se dirigiam ao noroeste espanhol. Durante a Guerra Civil (1936-1939) abrigou no Palácio Canto del Pico o comando da famosa e cruel Batalha de Brunete. Após a guerra o ditador Francisco Franco tomou posse do castelo e se refugiava nele quando havia ameaças de atentado.

Trata-se de uma população muito tradicional, atenciosa e hospitaleira, que abriga uma grande quantidade de casais novos com filhos pequenos. Os principais desafios missionários que vemos aqui são o trabalho com famílias, idosos, jovens e com os imigrantes. Além disso, devido a proximidade com a capital poderemos atender, como igreja, à pessoas residentes em Madrid.

quinta-feira, 25 de outubro de 2007

Outubro 2007

Vamos agradecer a Deus por:
1. Já estarmos instalados em Madrid
2. Pela vida da nova igreja que está nascendo aqui
3. Pelo início do projeto missionário e atendimento aos nossos obreiros
4. Pela comemoração do Dia da Reforma em nossa igreja de Torrelodones que foi tão especial para todos nós

Vamos rogar a Deus por:
1. Pela saúde, família e sustento dos nossos missionários na Europa
2. Pela viagem à Rússia: obtenção do visto, apoio aos nossos missionários (Marcelo e família; Fábio)
3. Pelo fortalecimento da Igreja Presbiteriana de Torrelodones (Madrid) e oportunidades para o anúncio do evangelho aos espanhóis e demais europeus.
4. Para Deus dirigir a vida e ministério dos nossos missionários na Rússia, neste momento em que o governo mudou as regras para a renovação de vistos religiosos anuais, exigindo que os vistos sejam renovados sempre no país de origem do missionário (e não em um país vizinho) após 3 meses de ausência da Rússia. Oremos, pois é muito complicado para os missionários passarem 3 meses por ano no Brasil com suas famílias apenas para renovarem seus vistos.

Conheça a Base Europa

A Base Europa é um projeto da Agência Presbiteriana de Missões Transculturais (APMT), um dos órgãos missionários da Igreja Presbiteriana do Brasil e tem como principais objetivos plantar uma igreja reformada em Madrid, representar a APMT junto às equipes missionárias e seus projetos, atender in loco e com maior presteza as necessidades e demandas surgidas nos campos, contatar outras agências e denominações na Europa visando possíveis parcerias missionárias, buscar novas oportunidades de trabalho e oferecer apoio pastoral com maior constância aos missionários e suas famílias no próprio campo